Hoy tengo poco que contar en relación a las labores que estoy haciendo, sigo con la bufanda de Maite y ayer pinté la silla de estudio, pero poco más, aún estoy resentida del nervio ciático.
La verdad es que todas las mañanas abro mi blog con la ilusión de ver si alguien me ha visitado... pero como no se poner eso del contador de visitas pues no lo se, pero me digo ¿que más da? si al fin y al cabo esto lo que pretendía ser es una especie de diario de mis cosillas, claro que también me gustaría poder ser capaz de volcar aquí mis pensamientos e inquietudes, aunque verbalizarlas siempre se me ha dado mal, veo que para escribirlas también soy un poco tímida.
Voy camino de los 50 y mis hijas ya tienen una edad en la que a veces pienso.. ¡pero si yo soy como ellas aún! ... no se si me explico bien, creo que no soy consciente de los años que ya he vivido, de lo mucho que me ha sucedido y de lo poco que creo que he hecho. Aunque hay momentos en que me paro a recordar y vaya si ha pasado el tiempo y poco consciente he sido en cada momento de que era único y que nunca más se vuelven a repetir las circunstancias.
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